La Locura de Alargar una Telenovela

Mi querido amigo VICENTEBLO se refiere a Mágica Juventud y postula que no se parece nada a Muchachitas. Le doy la razón en cuanto a que en Mágica había realmente una protagonista indiscutible que era Kate. Él considera que Mágica era más real. Debo confesar ante ustedes que no me acuerdo mucho de esa telenovela (como el resto de los televidentes). Sé que teníamos una historia con una maga (que hacía Claudia Silva), que teníamos a gente de la tercera edad (Carmen Montejo), la pizzería; creo que nos llevamos el mesero de Muchachitas (Raúl Alberto) pero no me acuerdo de la historia (¡qué vergüenza!).

JP habla del giro de El Premio Mayor (con la salida de Sasha y Sergio Goyri). Menciona que la vio en el '96, en Chile. Empezó a verla justo cuando se moría Rosario y la Virgen de Guadalupe se la llevaba... 

ERNESTO ESQUIVEL me provoca emociones muy gratas (quizá no las merezco). Dice que soy increíble y se lo agradezco con todo el corazón. 

LUIS habla de los cambios de Tú y Yo y de la introducción de Itatí y Gatorno. La verdad es que, en ese entonces de la historia de la telenovela, cualquier telenovela que tuviera éxito era alargada. Iniciábamos con 100 capítulos y este número crecía y crecía (ahora voy a narrar lo que sucedió con Las Vías del Amor). Para alargar una telenovela siempre metía personajes e historias nuevas que se insertaran en la principal de alguna manera, pero que tenían su propio origen (fue el caso de las nuevas Muchachitas, de los personajes de Irán Castillo y Kuno Becker  y otros de los que ya no me acuerdo). A pesar de todos las broncas de Tú y Yo, tuvimos más o menos 40 capítulos más. Se dice fácil, pero son dos meses al aire. 

Modestia aparte pero un día me mostraron la estadística de todas las telenovelas importantes que habían sido alargadas y, las mías (que eran bastantes), nunca bajaron sus niveles de audiencia. Un gran ejemplo es La Fea Más Bella. Junto con Palmira Olguín, le agregamos 9 meses de aire. Lo hicimos gracias a que metimos a un personaje nuevo (Juan Soler) y escarbamos en las historias personales y de familia de las secretarias y otros personajes secundarios.

Bueno, nos tocaba hablar de la telenovela número 11: Las Vías del Amor (que inició al aire el 5 de agosto de 2002) y tuvo "nada más" 220 capítulos, es decir 11 meses al aire (hasta el 6 de junio de 2003). 

Algo ya he hablado en este blog sobre la idea del Sr. Emilio Larrosa de basar esta telenovela en un personaje con una doble vida: en las mañanas sería conductora del Metro y, en las noches, sería D. J. en un antro. La idea de Mr. Larrosa era buena, pero bastante elemental: todo lo demás fue creado después. El tema más importante, según yo, era la rivalidad de los hermanos (Jorge Salinas y Gabriel Soto).

El primer problema (como señalé antes) fue que el señor AMLO, en ese entonces, Jefe de Gobierno del D. F., ¡no nos dio permiso de grabar en el Metro! Entonces, el concepto tenía que cambiar un poco. Además, creo que nunca entendí bien la idea de la doble vida de la heroína. Se supone que tenía un papá muy conservador (era José Carlos Ruiz), pero me parecía poco realista que le prohibiera "tocar" en el antro. 

En fin, lo que pasó fue que, en este caso, la extensión de capítulos, de 100 a 220, fue llevada a cabo "a pasitos" y eso me desquició y casi me lleva al psiquiátrico otra vez. En otras palabras, lo que debió pasar es que se me hubiera informado: "mira, Alejandro, vamos a hacer 220 capítulos". Así no fue... Primero 140, luego 180, luego 200, luego 220. ¡La locura! 

En una de esas le dije al Sr. Larrosa: "ya no puedo más. La telenovela no se va a poder seguir alargando. ¡Se acabó!" Mi querido ex jefe se lo transmitió a los ejecutivos de la empresa, que contestaron: "entonces, que escriba alguien otro". 

... Continuará...