Y el riesgo ¿dónde se quedó?

pasión por las novelas me escribe: "es muy triste, Televisa ya no es lo que era; se van muy al éxito probado ¿y el riesgo dónde quedó? ¿Dónde quedó la Televisa de Amor en Silencio, Cuna de Lobos, Días sin luna... la Televisa que sabía hacer las cosas? ¿A qué crees que se debe que se hayan acomodado tanto?

El fenómeno, me parece, tiene ya muchos años y, a mi gusto, ha contribuido, en parte, a que hayan disminuido las audiencias de las telenovelas y que Televisa haya cambiado de negocio principal. Es decir: antes, el 80 por ciento de sus ingreso provenía de la venta de tiempo publicitarios; ahora su core business son los servicios de telecomunicaciones (Izzi, Sky, Cablevisión, etcétera), según un artículo que leí en El Economista. 

No sé por qué dicen que hacer telenovelas originales es un riesgo. Me parece más riesgo, hacer refritos de otros países y "parcharlos" para que se adapten a nuestra cultura; o refritos de novelas viejas que es necesario modernizar. En gran parte son los productores los que solicitan estas historias. Mi gran amigo Nicandro Díaz, que lleva 13 telenovelas como productor ejecutivo (dice la Wikipedia), no ha hecho una sola telenovela original. Aún el Sr. Larrosa, después de que salí, hizo el refrito de El Camino Secreto, el de Hasta que la Plata nos Separe (que le fue muy bien), la de los taxis (que era colombiana), etcétera. El Sr. Osorio hizo una telenovela original (conmigo) que no funcionó tan bien: Sueño de Amor. Ahora, se basa en la televisión coreana. 

Cuando salió el Lic. Murguía de Televisa (fue Vicepresidente de Producción durante muchos años), entró a manejar los contenidos un tal señor Patricio Wills (era el año de 2018). ¿Qué creen? Era colombiano. Patricio Wills hizo su productora (W Studios) en sociedad con Televisa, y no sé realmente a qué acuerdo llegó con la empresa para dirigir los contenidos y producir con su productora. En todo caso, durante el reinado del Sr. Wills, la telenovela quedó relegada. Ahora, la empresa, haría contenidos más "modernos", más "millennial", más aptos para las plataformas. De ahí salieron La Piloto, Sin Miedo a la Verdad, etcétera.

Tuvo tanto "éxito" que, en menos de dos años, regresó el Lic. Murguía, quien, de inmediato, repuso dos de los horarios para telenovelas que Wills había quitado (por eso tenemos Quererlo Todo y Fuego Ardiente).

Yo pienso que debería de haber un departamento (actualmente, es el Ing. Eduardo Sepúlveda el que maneja los contenidos) que promoviera a los escritores y creativos mexicanos. Se debería de crear un archivo con historias originales. Los proyectos deberían de ser analizados por un grupo "competente" (que realmente no existe) y ser ofrecidos a los productores. (Sin embargo, por lo que me dice Chava Mejía, por ejemplo, el Ing. Sepúlveda, le ofreció hacer un refrito; lo que querría decir que el tema viene desde "arriba", desde los ejecutivos). Debería de haber convocatorias, seminarios, talleres para escritores mexicanos o con historias nuevas y frescas (sin perder la esencia de la telenovela). 

Como queda claro, eso no se hace. A la empresa no le importa desarrollar nuevos y originales creativos. (Antes, por lo menos financiaba el diplomado para telenovelas en la Ibero, del que salieron Pablo Ferrer y Natalia Mejía; chavos que colaboraron conmigo cuando estuve con el Sr. Osorio).

Hace años yo le ofrecí al propio Lic. Murguía crear una empresa (se llamaría Trama) que hiciera justamente eso: el acopio y desarrollo de historias originales. 

Como siempre, les pido amablemente, que me manden sus comentarios en cuanto a lo que quieren saber.

Continuará...